El sector hotelero en Colombia continúa su recuperación tras el impacto de la pandemia. Según el informe de indicadores publicado por la Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco), la ocupación hotelera nacional en agosto de 2024 se ubicó en el 48,10%. Esta cifra, aunque aún lejos del 60,22% registrado en el mismo periodo de 2019, representa un avance significativo respecto al 5,28% de agosto de 2020, cuando la industria se encontraba en plena crisis por las restricciones sanitarias.
En lo que va del año, es decir de enero a agosto, la ocupación hotelera se sitúa en un 34,96%, impulsada por un crecimiento sostenido en los últimos tres meses. Este comportamiento positivo ha llevado a Cotelco a ajustar sus proyecciones de cierre de año, elevándolas de un 34,0% a un 39,5%, mostrando optimismo en la reactivación del turismo nacional.
Sin embargo, el sector hotelero aún enfrenta desafíos importantes. La rentabilidad sigue siendo negativa, con una caída del 44,4% en comparación con el mismo periodo de 2019. Esta situación se debe a la menor ocupación acumulada durante el año y a la disminución de la tarifa promedio nacional en un 15%. Según José Andrés Duarte, presidente ejecutivo de Cotelco, aunque la recuperación de la ocupación es alentadora, la industria aún necesita al menos un año adicional para compensar las pérdidas acumuladas y restablecer la estabilidad financiera.
San Andrés se posiciona como el destino con mayor ocupación en agosto, alcanzando el 74,03%, muy cerca del 78,12% registrado en 2019. Otros destinos que destacan por su desempeño son Magdalena y Santa Marta, con un 63,38% de ocupación, superando incluso las cifras prepandemia de agosto 2019, cuando el indicador se situó en 56,85%. Cartagena, por su parte, mostró un nivel de ocupación del 59,14%, mientras que Antioquia registró un 58,73%, seguido por el Tolima y Alto Magdalena con 57,97%.
En contraste, Cundinamarca se ubicó como el destino con menor ocupación en agosto, con apenas un 16,97%, seguido de Caldas con 34,57% y Nariño con 35,40%, regiones que aún enfrentan un rezago significativo en su fase de recuperación. La ciudad de Bogotá también muestra una recuperación más lenta, en gran parte debido a la débil recuperación del turismo corporativo y de eventos, y a la falta de flujo constante de turistas extranjeros.
El reporte también resalta el crecimiento del Valle del Cauca, una región fuertemente afectada por la pandemia y las manifestaciones sociales de los últimos años. Aunque aún no alcanza los niveles prepandemia, se observa una tendencia positiva y un trabajo articulado entre el sector público y privado para reactivar el turismo en la región.
El sector hotelero enfrenta un panorama mixto, con una recuperación que avanza de manera desigual entre las diferentes regiones del país. La reactivación del turismo depende en gran medida de la mejora en la confianza de los viajeros y la recuperación de los ingresos que permitan a los hoteles salir del déficit financiero que aún persiste.