La Superintendencia de Salud y la Superintendencia de la Economía Solidaria han revelado graves irregularidades financieras que involucran a Coosalud EPS, Coosalud Inversa y Coosalud Cooperativa. Según las investigaciones, Coosalud EPS transfirió $433.000 millones a Coosalud Inversa, incluidos $203.000 millones debitados en noviembre y $229.000 millones en préstamos previos.
Entre las transacciones destacadas, Coosalud Inversa utilizó los recursos para comprar un inmueble por $10.000 millones, ahora arrendado a Coosalud EPS por $1.000 millones mensuales. Además, la EPS vendió 812 acciones a Coosalud Inversa por $172.000 millones, lo que ha despertado sospechas de uso indebido de fondos.
La SuperSolidaria detectó inconsistencias en los estados financieros de las empresas y denunció posibles violaciones a las leyes contra el lavado de activos. Se señala que Coosalud Cooperativa habría desviado recursos de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), destinados exclusivamente a la atención médica.
Un aspecto crítico es que las tres entidades comparten el mismo representante legal, Jaime González, lo que plantea dudas sobre conflictos de interés y facilita las irregularidades.
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