El Sistema de Medios Públicos, RTVC, ha sido señalado de convertirse en una herramienta de propaganda bajo la dirección de Hollman Morris, cercano al presidente Gustavo Petro. Las denuncias, detalladas por La Silla Vacía, giran en torno a un sesgo a favor del gobierno y una disminución en la pluralidad informativa. En 2024, con un presupuesto de 385 mil millones de pesos, RTVC ha incrementado significativamente su contenido informativo, en especial sobre el gobierno, al tiempo que han reducido los espacios culturales. Según el análisis de La Silla Vacía, el tiempo al aire para contenido político y noticieros aumentó en un 690% desde el inicio del mandato de Morris.
Comparado con la época de Álvaro García, gerente de RTVC en el gobierno de Iván Duque, la diferencia es evidente. En julio de 2024, las emisiones de RTVC presentan mayormente titulares favorables al presidente Petro, mientras que las voces críticas han sido prácticamente invisibles en sus noticieros y programas de opinión. En una revisión de 30 emisiones, 9 de 15 abrieron con noticias directamente relacionadas con Petro, reforzando la imagen de un líder combativo. Sin embargo, estas notas omitían en su mayoría opiniones contrarias o análisis críticos.
El incremento del protagonismo de Petro se refleja también en el programa “El Calentao”, donde de las últimas 50 voces invitadas, 33 fueron alineadas con el gobierno. Este programa, que cubre la franja matutina en RTVC y Radio Nacional, se ha convertido en una plataforma para amplificar la narrativa del gobierno, bajo la dirección de Mauricio Jaramillo Jassir. Mientras tanto, la salida de figuras clave como Nórida Rodríguez y Silvana Orlandelli ha sido vinculada a disputas internas sobre la línea editorial.
Críticos como Germán Rey señalan que, a diferencia de la gestión de García, donde las opiniones contrarias tenían mayor espacio, el RTVC de Morris se ha convertido en una “caja de resonancia” del gobierno de Petro. Jorge Iván Bonilla, experto en medios, afirma que el medio público ha asumido una postura de contranarrativa frente a los medios tradicionales y opositores.
Este cambio ha generado tensiones en el periodismo colombiano. La FLIP ha reportado denuncias sobre censura interna y redireccionamiento de temas en RTVC, afectando la independencia editorial. Para Hollman Morris, RTVC es un instrumento necesario para equilibrar la balanza frente a los “medios tradicionales que sirven al poder económico”. Pero muchos periodistas y defensores de la libertad de prensa lo ven como un retroceso en el papel de los medios públicos, ahora plenamente alineados con el gobierno.
Las implicaciones a futuro son significativas. La consolidación de RTVC como un altavoz del gobierno de Petro plantea preguntas sobre el uso de recursos públicos y la libertad de prensa en Colombia, abriendo el debate sobre el verdadero papel de los medios públicos en una democracia.
