Durante una visita oficial al municipio de Puerto Gaitán, en el departamento del Meta, el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, fue señalado por su lenguaje ofensivo hacia la gerente de la Empresa Social del Estado (ESE) local, María del Carmen Rodríguez. El hecho, registrado en video y compartido en redes sociales, generó diversas reacciones, incluida una declaración de rechazo por parte de la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés.
El ministro Jaramillo se encontraba en el municipio como parte de un recorrido por zonas del país afectadas por un brote de fiebre amarilla. Durante su visita, sostuvo reuniones con comunidades indígenas de los pueblos Sikuani, Piapoco, Cubeo y Sáliba, además de visitar las instalaciones de salud pública del municipio. Fue en este contexto donde ocurrió el incidente con la funcionaria de salud.
En el video divulgado por el concejal de Bogotá, Amin “Papo” Díaz, se escucha al ministro increpando a la gerente con expresiones ofensivas, incluyendo la frase: “Ojalá le tocara a usted, se enfermara y no tuviera familia, hijueputa y la mandaran para Villavicencio o para Bogotá, para que tuviera que ir detrás su familia.”
Frente a este hecho, la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés, emitió un pronunciamiento público a través de la red social X (antes Twitter), en el que cuestionó directamente la conducta del ministro y pidió explicaciones sobre el mensaje que se transmite con este tipo de comportamientos.
“Ministro Jaramillo: Como mujer y defensora de nuestros derechos, debo elevar mi más enérgica voz de protesta. No tiene ninguna justificación hablarle así a una mujer utilizando su posición de poder; tampoco a intimidarla y menos a desearle que ojalá se enferme y la tengan que mandar lejos de su tierra y de su familia”, escribió la mandataria.
En su mensaje, también preguntó: “¿Ese es el ejemplo que usted le quiere dar a otros hombres?” y recordó que en Puerto Gaitán, recientemente, una madre y su hija fueron víctimas de homicidio, lo cual acentúa la sensibilidad del tema de violencia de género en la región.
Cortés finalizó su pronunciamiento señalando que este tipo de comportamientos reflejan patrones de maltrato, donde la figura de autoridad se ejerce mediante gritos e insultos, justificados por presuntas intenciones de “mejorar” la gestión de los funcionarios locales.
Hasta el momento, no se ha conocido un pronunciamiento oficial del ministro Jaramillo sobre lo sucedido. El caso ha generado debate nacional sobre el respeto en la función pública, especialmente en escenarios institucionales y territoriales donde se enfrentan problemáticas sociales y de salud pública.
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